Descubrí que uno de mis esclavos había hecho algo que no le había permitido hacer. Él estaba un poco sorprendido cuando de repente lo llevé de su trabajo en el jardín al gran estudio. Hoy sabe lo que significa ser sometido a un interrogatorio en bastidores. Sacaré a este bueno de su jaula y lo llevo al estante. Está arreglado allí con las manos y los pies. Sus manos están unidas a las cadenas que están conectadas al. Enciendo el de la cabecera y él puede escuchar las fuertes aplaudidas de la palanca en el cabrestante del estante. Es estirado hasta que ya no puede moverse. Pero eso es sólo el comienzo. Cajeo el poco a poco hasta que comienza a gritar de dolor. Sigo preguntándole si quiere confesar. Lo pregunto por sus fechorías. Él pide piedad ... pero no hay piedad de mi parte. Su dolor está aumentando más y más, al igual que sus lloriqueos. Me parece que el estante es una herramienta maravillosa para obtener una confesión de esclavos
ESTE SITIO WEB CONTIENE MATERIAL SEXUALMENTE EXPLÍCITO (incluyendo material pornográfico).
Debes tener al menos dieciocho (18) años para utilizar este sitio web, a menos que la mayoría de edad de
tu jurisdicción sea superior a dieciocho (18) años, en cuyo caso deberás tener al menos la mayoría de
edad según tu jurisdicción. El uso de este sitio web no está permitido donde esté prohibido por ley. Este
sitio web también requiere el uso de cookies. Puedes encontrar más información sobre nuestras cookies en
nuestra Política de privacidad y Política de cookies.
AL ENTRAR EN ESTE SITIO WEB Y
UTILIZARLO ACEPTAS NUESTRAPOLÍTICA DE PRIVACIDAD Y
EL USO DE COOKIES.